Es complicado... tener un cúmulo de emociones y un nudo inmenso en la garganta.
Cómo es cuando todo es tan intenso, tan similar a una droga, adictivo, no puedes desprenderte, no puedes separarte, avanzas, a pasos agigantados, sintiéndote flotar. Estás inspirado, de tu mente y de tu boca (o teclado) salen las palabras más bonitas que alguna vez pudiste pronunciar (o tipear) y del otro lado recibes una descarga de lo mismo y quizás de una mayor intensidad inclusive.
Todo es tan fuerte, se genera un vínculo quizás inquebrantable, armas una alianza para toda la vida, consigues un(a) cómplice en la que puedes depositar toda tu confianza, mostrarte cual eres, lucir sin corazas, hablar sin tapujos, ser simplemente tú.
Y a veces, o casi siempre, como una droga, se comporta haciéndote alucinar, caminar sobre las nubes, produciendo elucubraciones que de ningún otro modo hubiesen pasado por tu cabeza, incluso las canciones que alguna vez descartabas por "muy lentas" ahora suenan como hermosas melodías y sientes que sólo vives para escucharlas e intercambiarlas... y, sin embargo, como diría el gran poeta Vallejo: hay golpes en la vida, tan fuertes, yo no sé. Golpes que te hacen abrir los ojos y ver que es bonito andar paseando por realidades paralelas, pero que más importante aún es mantener los pies en la tierra. Yo recomiendo en estos casos desarrollar un lado serio, circunspecto, duro como una roca, parafraseando a Luis Miguel, "el Sol de México", frío como el viento y peligroso como el mar, porque este lado será el que aterrice tu mente, tus pensamientos cuando sientas que se está soltando mucha cuerda y empiezas a volar demasiado.
Los amores cobardes no son amores dice Silvio, pero los amores deben ser reales y sostenerse sobre la base del contacto permanente. Hay barrera naturales que aparecen y por ese carácter natural que poseen es probable que siempre estén ahí, como la fotografía a continuación.
A pesar de que algunos prefieran (me incluyo) mantener siempre un perfil bajo, es común verse tentado por estar presente, ser tomado en cuenta, alcanzar el número 1, el primer lugar, pero sólo esta vez -y prometo que será la única- a mí, me encantaría ser Plan B.
Bonus track: canción de Dave Matthews Band... con el gran Carter Beauford en batería... un grande.
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